La película está situada en el peor de los lugares y momentos posibles, en Varsovia durante la invasión Nazi, y pese a ello no logra derribar ninguna piedra emocional, ya que su directora, Niki Caro, le da más relevancia a la ficción que a la realidad brutal que pasó durante la llegada del ejército alemán.
El filme narra la acción heroica del matrimonio de Jan y Antonia Zabinski, que salvaron a más de 300 judíos de terminar en los campos de concentración alemanes. Estaban a cargo del zoológico de la ciudad de Varsovia en Polonia. Cuando llegaron los nazis y encerraron a los judíos en el Gueto de Varsovia, ambos decidieron jugarse la vida y usar las instalaciones para esconderlos en el zoológico como vía de paso para la libertad, bajo las narices de la tropa alemana que se instaló en el zoológico durante la invasión.
Es un producto lleno de buenas intenciones que no cae en los clichés emocionales, ya que no muestra las atrocidades que hicieron los nazi al pueblo judío durante su estadía en Polonia. Apela a la solidaridad del público ante los atropellos del régimen alemán en la capital polaca.
“Un refugio inesperado” tiene un tono moderado que permite al espectador disfrutar de una película que denuncia las atrocidades del ejercito invasor, sin sentirse desahuciado o triste, ya que es un relato que apela más a la ficción que a lo emocional, dado que la historia real se dulcifica en el filme.
La sencillez de la trama contrasta con lo que debió ser en realidad, y el guion no ayuda siendo previsible y repleto de situaciones antes vistas: lugares comunes que le quitan la tensión dramática y, por eso, el público se siente un poco alejado de la historia.
Seguramente, esta historia merecía ser mejor desarrollada, con un guion que hubiese retratado mejor el riesgo que corrían los protagonistas del filme. Los Zabinski, como Schindler, salvaron a centenares de víctimas del fascismo nazi, pero la manera en que Caro cuenta su historia no se asemeja más que por el valor, la valentía de los protagonistas a La lista de Schindler, de Spielberg. Por lo tanto, el trabajo de dirección de Niki Caro resulta un tanto irregular, plano y carente de fuerza salvo por la potencia de su primer acto y de algunas escenas aisladas.
La narrativa es creíble y la estructura de la película está bien hecha. La ambientación y la fotografías son buenas. El papel principal de Jesica Chastain está llena de matices: por un lado, una mujer que ama a los animales y se muestra débil y aterrada y, por el otro, demuestra ser fuerte y se hace cargo de la decisión que tomó a pesar de poner en riesgo su vida.
En conclusión, a pesar de las buenas intenciones, “Un refugio inesperado” no termina de despuntar, quedándose como una película más de tantas que han utilizado la Segunda Guerra Mundial para demostrar que el ser humano es tan capaz de lo mejor como de lo peor, aunque, tal y como indica el título español, la balanza acabe inclinándose por la ilusión de que hay personas generosas y valientes dispuestas a arriesgarlo todo por salvar a otros seres vivos y a cambio de nada.
“Un refugio inesperado” se encuentra disponible en la plataforma de Netflix y Canal Universal.
https://www.youtube.com/watch?v=kdVcVBASKvo
Calificación
Dirección
Montaje
Arte y Fotografia
Música
Actuación
El trabajo de dirección de Niki Caro resulta un tanto irregular, plano y carente de fuerza salvo por la potencia de su primer acto y de algunas escenas aisladas. A pesar de las buenas intenciones, Un refugio inesperado no termina de despuntar, quedándose como una película más de tantas que han utilizado la Segunda Guerra Mundial para demostrar que el ser humano es tan capaz de lo mejor como de lo peor, aunque, tal y como indica el título español, la balanza acabe inclinándose por la ilusión de que hay personas generosas y valientes dispuestas a arriesgarlo todo por salvar a otros seres vivos y a cambio de nada.