El teatro independiente tiene grandes exponentes y proyectos que demuestran el talento y la vocación de quienes aman la profesión. Entre ellos se encuentra la dupla conformada por Lisandro Penelas y Ana Scannapieco quienes hace tiempo vienen sorprendiendo y deleitando al público con sus creaciones. “El Tipo”, “El amante de los caballos” o “Familia de artistas” son algunos de los ejemplos más reconocidos. Intercalando los roles (dirección/actuación) o compartiendo el escenario ambos artistas demuestran que el teatro fluye por sus venas, aunque en esta oportunidad también los helados. “La Heladería” es una obra creada por la misma Ana Scannapieco la cual muestra en escena una parte muy importante de su vida: el legado heladero de su familia, ya que ella es descendiente del fundador de la famosa Heladería Scannapieco.
Protagonizada por la misma Ana junto a Boy Olmi y Pablo Fusco bajo dirección de Lisandro Penelas “La Heladería” llegó a la sala Picasso del Paseo La Plaza (Av. Corrientes 1660, CABA) cada domingo a las 19hs. Una comedia que produce a la par carcajadas, emoción y, por supuesto, ganas de salir corriendo a tomar un helado de la famosa marca que, para suerte de los espectadores, posee una pequeña sucursal en el mismo complejo teatral.
A principio del siglo pasado el abuelo de Ana proveniente de familia italiana aprendió el oficio de heladero y abrió su propio local que tiempo después se convertiría en un emblema de la ciudad de Buenos Aires. Esta pieza cuenta justamente esa historia y lo hace de forma muy hábil entremezclando la realidad, la ficción y los recuerdos. Se trata de un tributo que abarca mucho más de lo que parece, no se trata solo un homenaje a la familia sino también a la niñez, al trabajo y todos los inmigrantes que forjaron una vida en Argentina.
Como es habitual en las obras de Penelas y Scannapieco la historia y la expresión corporal se complementan a la perfección para darle un plus a la puesta. Más allá de los elementos escenográficos específicamente elegidos y a los pequeños cambios de vestuario, el relato se llena con la propuesta corporal de los actores que dan vida a varios personajes de distintas edades. Esto último es el recurso más rico del proyecto.
“La Heladería” es una propuesta sumamente divertida y emotiva. Una obra que nació con una magia especial, esa misma que tienen los helados que fabrican la familia Scannapieco. Verla provoca la misma sensación de felicidad y bienestar que da un buen helado un día de calor. Cuando una obra logra conectar con el público de la forma que lo hace esta es cuando realmente se está en presencia de una obra de arte. No se la pierdan.
Calificación
Dirección
Texto
Actuaciones
Esceonografía
Iluminación
“La Heladería” es una propuesta sumamente divertida y emotiva. Una obra que nació con una magia especial, esa misma que tienen los helados que fabrican la familia Scannapieco.