“La inmensidad” de Emanuele Crialese. Crítica.

El concepto de estreno por más objetivo que sea, no deja de ser subjetivo para cada país. Un claro ejemplo de esto es “La inmensidad”, la última película de Emanuele Crialese. Se proyectó por primera vez en el año 2022, sin embargo llega a las salas argentinas recién este jueves 1 de agosto. 

Andrea (Luana Giuliani), se acaba de mudar a Roma. En simultáneo descubre tres cosas. La primera es que ya no quiere ser Adriana, sino Andrea. Por otro lado, su madre (Penélope Cruz) es profundamente infeliz en su matrimonio y no logra separarse. La tercera pero no menos importante, es que se enamoró de una chica gitana que vive en un descampado enfrente de su edificio. 

Crialese, elige a una familia italiana de clase media alta como núcleo de su historia. Poniendo el punto de vista en el hijo mayor, Andrea. Quien además de intentar descifrar todo lo que le está sucediendo a él como persona, debe defender a su madre de los maltratos de su padre.

El bello departamento, los sillones de terciopelo y las vacaciones por el mediterraneo, no consiguen tapar la cruda verdad. La familia está rota, el matrimonio ya no puede estar junto, pero las normas sociales de los 70s veían mal a quienes se separaban. A fin de sobrevivir Clara y Andrea crean medios de escape.

La televisión es uno de ellos, una realidad ficticia que se les presenta a los personajes a través de una pantalla. Así como ellos se nos presentan a nosotros. También tenemos pequeños números musicales, que dicen presente siempre que la realidad se oscurese.

Por último, Andrea pasa su tiempo inventando juegos para el y sus hermanos, para sus hermanos y sus primos. Empero, estos se ven interrumpidos por la presencia de Clara. Ella busca utilizar la misma mecánica que sus hijos para alejarse, aunque sea por instantes de su horrible matrimonio. Esos son los momentos en que la hija se convierte en adulta y detiene a la madre de hacer cosas no apropiadas para su edad. 

El más interesante de estos juegos formales, tiene forma de cañaveral. Se trata de una tupida plantación de cañas que separa la casa de Andrea del descampado donde vive Sara. Allí Andrea es libre de ser quien quiere ser, no importa el nombre que dice su documento, ni su clase social. Es la felicidad en un estado de inocencia de lo más puro. 

Emanuele Crialese no deja nada de su caja de herramientas sin usar. “La inmensidad”, es una historia tan tierna como cruda. Penélope Cruz y Luana Giuliani consiguen una química sin igual. Al tiempo que la fotografía y la música acompañan a la perfección la elección del punto de vista del joven protagonista.