No cabe la menor duda que estamos en la era de las remakes, reboots y demás productos reciclados para una nueva generación. Este es el caso de El Duro, film dirigido por Doug Liman y protagonizada por Jake Gyllenhall y el peleador irlandés Conor McGregor.

Dalton (Jake Gyllenhaal) era un luchador reconocido de la UFC hasta que un evento fortuito hace que se autoexilie en el circuito callejero hasta que Frankie (Jessica Williams) le pida que trabaje como una especie de patovica en el bar del que ella es dueña, en los Cayos del Estado de Florida.

A grandes rasgos, la película mantiene la esencia de la cinta original, estrenada en 1989 y protagonizada por Patrick Swayze -disponible también en la misma plataforma de streaming-. Varios de los cambios son favorables, por ejemplo, trasladar los hechos hacia las costas estadounidenses para agregarle diversidad al elenco y lo más importante, darle bastante más carácter a los personajes femeninos, que lo único que hacían en la anterior era sacarse la ropa. Definitivamente podemos ver que los tiempos son otros.

Además, a diferencia del Dalton de Swayze, como espectadores podemos conocer un poco más del trasfondo de los traumas que persiguen y acechan al personaje de Gyllenhaal. El actor de Un Mundo Extraño vuelve a sacar su faceta de peleador, tal como lo hizo en Revancha (2015), de Antoine Fuqua. Y sale airoso, ya que a esta altura de su carrera, sabe lo que hace.

Doug Liman sabe dirigir acción

Liman es el responsable de films como Sr. y Sra. Smith (2005, con Brad Pitt y Angelina Jolie), Identidad Desconocida (2002, con Matt Damon) y Al Filo del Mañana (2014, con Tom Cruise y Emily Blunt). Con estos datos, podemos dar por sentado que tiene claro cómo filmar una de acción. Sin embargo, el problema recae en no mejorar la idea y el conflicto principal de la original, lo que hace que se desdibujen varios elementos. Es decir: lo que falló en 1989, también falla en 2024.

Por otra parte, no creemos que el futuro de alguien como Conor McGregor esté en la actuación, pero si quiere seguir interpretando a una versión exagerada de sí mismo, bienvenido sea.

En conclusión, esta versión de El Duro entretiene, hace reír a momentos, pero no cambia el género. Tampoco pretende hacerlo. Pero que se haya estrenado directamente en Prime Video es una decisión bastante acertada.