“A Virxe Rosa” Crítica. Libertad condicionada

¿Hasta dónde se puede controlar la vida y las acciones de un ser pensante? Toda manipulación tiene sus límites y traspasarlos conlleva consecuencias catastróficas. A Virxe Rosa (La Virgen Roja), del realizador gallego Marcos Nine, forma parte de la segunda edición del Festival Internacional de Cine Documental, DOCA, disponible desde el 14 al 22 de diciembre de manera virtual y gratuita por la plataforma Vivamos Cultura.

Esta es la historia de un crimen ocurrido en la España de 1933, cuando Aurora Rodriguez asesina a su hija de 18 años, Hildegart Rodriguez. A través de testimonios y algún que otro material de archivo, se reconstruirá tanto el contexto sociopolítico del momento como la dinámica familiar de ambas y los increíbles acontecimientos que llevaron a que ocurra semejante tragedia.

La simbiosis entre relato, declaraciones y montaje hacen del largometraje algo atrapante; es una especie de thriller que tranquilamente puede pertenecer al género del true crime, que tanto auge tiene en estos últimos años. La edición de las imágenes en blanco y negro acompañan a la narración de modo tal que las connotaciones no pasan desapercibidas. Un maravilloso trabajo de recopilación de material.

Tiene, además, la biografía desconocida de una mujer adelantada a su época: Hildegart, con 18 años, publicó dieciséis monografías y más de 150 artículos periodísticos, que abarcan temas como la prevención de enfermedades venéreas, la educación sexual y una crítica al socialismo -partido del cual formó parte como vicepresidenta-. Ella era un prodigio proyectado por su madre para ser el modelo de la mujer del futuro; pero la progenitora, al notar que podría perderla y arruinar los planes que tenía para la joven, decide matarla. Una demostración final de control y dominación.

Este es el tipo de documental que deja pensando al espectador mucho tiempo después de haberla visto. Un trozo de historia sobre mujeres que, a pesar de la época, ya buscaban su justo lugar en la sociedad.