A punto de estrenar el 16 de agosto Coqueluche en el Multiteatro Comafi, dialogamos con Mario Guerci. El modelo y actor integra el elenco que dirige José María Muscari y en exclusivo habló de los prejuicios que sufrió por ser “el cara linda” y dio su mirada sobre Julieta Poggio. Además confesó si volvería al “Bailando”.
-Mario se viene “Coqueluche”, ¿cómo te llegó la propuesta? ¿Cómo estás a punto de estrenar el 16 de agosto?
-Estoy muy feliz porque tuvo una venta espectacular y una acogida del público muy grande y, al mismo tiempo, me encuentro con un nerviosismo típico de un estreno, pero en este momento hay poco tiempo para estar nerviosa porque uno está a full con el vestuario, la vida que tiene cada uno, las horas de ensayo todos los días, de lunes a sábados. Después del estreno te baja esa adrenalina, pero hicimos un gran trabajo, lo dimos todo.
-¿Cómo es la química en el equipo?
-La verdad es que bien, es un equipo muy chico, somos 5 actores en total. Es muy lindo grupo, nos llevamos muy bien porque somos un grupo multifacético y multi-generacional. Arrancamos en los 20 con Juli y pasamos a los 30, los 40…
-Distintas experiencias…
-Sí, uno siempre escucha que dicen “hay que escuchar a la gente grande que saben”, no sólo el zorro sabe más por viejo, sino por zorro dice el dicho. Hay que escuchar a la gente más grande que uno y además cuando son actrices espectaculares como Betiana Blum y Mónica Villa, que son surreales. Pero también está bueno escuchar a los más jóvenes cuando tenes una edad intermedia. Yo tengo 41 y cuando veo cómo se toma las cosas alguien de 20 digo: “Ahh, mira qué interesante esa visión”. Tengo un hijo de 12, lo escucho, lo miro y veo cómo está más actualizado en el mundo de hoy.
-¿Cómo es José María Muscari como director?
-Es increíble, yo laburé el año pasado en “Sex” y ahí ya lo pude ver en un grupo más grande, más heterogéneo; ahora lo conocí en un grupo más chico, y con los dos elencos siempre lo veo igual. Es muy loco porque son cosas muy diferentes, aunque ambas tienen el sello distintivo de Muscari. Muscari le da otra cosa a la obra, te hace un musical con un decorado rosa, verde, parece la casa de Barbie, te hace canciones, hay partes coreografiadas, hay partes en mute que suceden cosas. Pero en verdad es un tipo súper educado, respetuoso y sabe muy bien lo que quiere como director: si bien te deja probar como actor, él sabe ya lo que quiere ver, tiene una idea determinada, así que es un muy buen tipo; a mí me encanta laburar con él.
Muscari es un tipo súper educado, respetuoso y sabe muy bien lo que quiere como director: si bien te deja probar como actor, él sabe ya lo que quiere ver, tiene una idea determinada”.
-¿Crees que hay cierto prejuicio en torno a Julieta Poggio?
-Bueno, ese mismo prejuicio me pasaba a mí también. Como siempre fui modelo decían: “¿qué va a hacer el cara linda?” Es medio lo mismo. Pero bueno, en el caso de Julieta se potencia porque está en un reality reciente, con millones de seguidores, y como hay gente que te quiere hay gente que no. Yo laburé con Juli en “Consentidos” en canal 9, ella tenía 7 años. Juli es una chica preparada porque baila, actúa, canta y tiene algo que no se compra ni se estudia ni se alquila: es el ángel y el carisma, y sin eso no ganas Gran Hermano y sin eso vos te subís a un escenario y no garpa que te subas. En cambio, si lo tenes, te subís y sonreís porque tenes carisma, y eso sucede y está buenísimo así que es bueno reencontrarme con Juli, además con esa estructura de juventud que tiene y todo el público que la quiere ver.
Juli Poggio tiene algo que no se compra ni se estudia ni se alquila: es el ángel y el carisma, y sin eso no ganas Gran Hermano y sin eso vos te subís a un escenario y no garpa que te subas”.
-El público la quiere ver…
-Sí, y como compañero me encanta y como productor me cerraría por todos lados. ¿Sabes cómo están Betiana y Juli actuando juntas? Hermosas las dos. Por eso, yo digo: “Vengan a verlo y después me cuentan”.
-¿Estás en otro proyecto ahora?
-No. Tengo unas cositas más como modelo pero ahora estoy aquí, aunque sea hasta el estreno, luego uno ya está más tranquilo porque sólo hay que hacer funciones.
-En ese caso, si de repente te llamara Tineli para el “Bailando”, ¿le dirías que sí?
-Si estuviera laburando en otro lado, diría que no, porque el año que lo hice tenía otro laburo más y me volví loco, está buenísimo pero requiere tu día entero y tu vida entera porque son horas y horas de ensayo más las horas que vas al piso y no bailas porque se hizo tarde y no entraste. Requiere muchísimo tiempo. Un día Fede Hoppe me dijo: “Vos podes enojarte con cosas, putearlo, pero esto no lo vas a vivir nunca”, y es verdad, es algo único estar en el “Bailando”, desde el vestuario hasta el programa, todo.
El ‘Bailando’ está buenísimo pero requiere tu día entero y tu vida entera”.