Debutó a los 16 años en “La noche de los lápices” y de ahí desarrolló una carrera ascendente en televisión, cine y teatro. A lo largo de su trayectoria participó de proyectos internacionales y obtuvo varios premios por su labor. Leonardo Sbaraglia estrena este jueves a las 22 horas “Ensayo para Güemes” por Canal Encuentro, un homenaje al caudillo y político argentino a 200 años de su fallecimiento, junto a Mercedes Morán bajo la dirección de Daniel Rosenfeld. En exclusiva nos cuenta qué significó para él conocer el lado más humano de Martín Miguel de Güemes y además, por qué sintió miedo cuando pasó por el covid.
-¿Qué te motivo para hacer “Ensayo para Güemes”?
El puntapié inicial fue saber que lo iba a hacer un director amigo (Daniel Rosenfeld), que aparte confío mucho artísticamente en él, porque al margen que es hablar de la figura de Güemes, lo relevante es también saber cómo eso se va a hacer: uno puede hacer una historia de Billiken como algo un poco acartonado y, justamente, lo que me parece meritorio, fue que Daniel (Rosenfeld) encontró, como director y hacedor de esta historia, algo muy moderno con mucho humor y descontracturado; y en el medio de este contexto de pandemia, con condiciones muy difíciles para trabajar y en tres días logró hacer un producto súper minimalista, teatral… y además con una cantidad de información emocional. La gente se va a llevar mucha data de este gran hacedor de nuestra historia que es Martín Miguel de Güemes, e información desde un lugar muy real y lindo. Estoy muy contento con lo que quedó.
-¿Cómo encaraste el personaje?
Más que encarar al personaje, lo que hicimos fue hablar de nosotros mismos. Si bien yo no hacía de mí, sí hacía de un actor que iba buscando al personaje. Más que nada fue tratar de meterse en esa historia y de ver un poco lo que le pasaría a uno, tratar de pensar en este hombre, en esa época, en las cosas que hizo, en lo que estaría viviendo y pasando en ese momento: Güemes había sido traicionado por alguien que no sé si la historia se encargó de denunciarlo; pero bueno, los realistas españoles pudieron entrar y pasar los controles hasta Salta y es ahí donde lo traicionan, le hacen una emboscada, logra escapar, le disparan y queda herido durante diez días. Lo interesante es cuando vienen los realistas y le dicen “te salvamos la vida si renuncias a la lucha”, y con un gesto heroico dejó que todo siga como tenía que seguir.
La gente se va a llevar mucha data de este gran hacedor de nuestra historia, que es Martín Miguel de Güemes; e información desde un lugar muy real y lindo. Estoy muy contento con lo que quedó”.
-¿Qué opinas que “Ensayo para Güemes” se transmita por Canal Encuentro?
A mí Canal Encuentro me parece que es una de las mejores cosas que tenemos en este país. Me parece que es un terreno donde se sigue generando contenido que no sólo tiene que ver con la cultura sino también con la educación, es como una aleación. Me parece muy lindo porque, muchas veces, transmitiendo educación también se puede hacer poesía, que es un poco lo que tiene este contenido y es un poco lo que tiene nuestro trabajo como actor: intentar crear metáfora, poesía y esto creo, es lo más valioso.
Más que encarar al personaje, lo que hicimos fue hablar de nosotros mismos”.
-Antes mencionaste acerca del contexto de pandemia. Te quería preguntar ¿Cómo transitaste vos el covid?
Por suerte, gracias al cielo lo pasé tranquilo. Con casi todos los síntomas que uno sabe que se pueden tener, pero muy leve. Mi cuerpo respondió bien. La médica me decía “no bajes la guardia porque al séptimo día se te puede complicar”, porque se produce un proceso inflamatorio en el cuerpo, que a veces produce cosas que son insospechadas. Podes tener un punto débil en el cuerpo, que ni siquiera vos sabes que lo tenés, o se puede generar por razones que la medicina todavía no conoce. Es algo bastante aleatorio.
Canal Encuentro me parece que es una de las mejores cosas que tenemos en este país”.
-¿Sentiste miedo de trabajar durante la pandemia?
No. Sentí más miedo cuando lo tuve, porque cuando lo tenés te das cuenta que es algo grave. Hay un grupo de gente que dice “es una gripe”. No, no es una gripe es una cosa que, aunque te de leve, sentís el tiburón dándote vueltas alrededor. Esa es la sensación que tenés. De hecho yo he perdido a un familiar, mi tía, y era una persona joven, sana y sin antecedentes. Además, he perdido a mucha gente querida, por eso hay que seguir cuidándose y seguir generando las condiciones para que la gente se cuide, sabiendo que tenemos entre manos a una cosa que es peligrosa, grave, y hay que seguir cuidándose hasta que realmente se encuentren los mecanismos, sea a través de la vacuna, sea mediante que la enfermedad vaya cediendo…
-Y con respecto a los protocolos, ¿en cuánto tiempo filmaron “Ensayo para Güemes” ya que se produjo en medio de la emergencia sanitaria?
No, fueron sólo tres días de rodajes, y éramos cuatro actores.
No es una gripe, es una cosa que, aunque te de leve, sentís el tiburón dándote vueltas alrededor”.
-En un momento del relato mencionas una frase de Pablo Bernasconi: “Al pueblo que quiere ser libre, no hay poder humano que lo sujete”. ¿Qué reflexión te merece?
Me parece una frase muy emocionante. Creo que hay algo de la fuerza de la naturaleza del ser humano que no la puede detener nadie, que puja por su libertad. Ni un sistema que encierra o reprime, puede detener a la humanidad y la naturaleza de la humanidad.