Durante el cierre del Festival Internacional de Cine de Mar del Plata, el sábado 28 de noviembre, se presentó la película “Inmortal” en la que participaron, entre los espectadores, el equipo técnico de Fernando Spiner. Natalia Spiner, su hija, fue la encargada de la composición musical: “Fue un proceso creativo raro, porque fue todo durante la pandemia. A diferencia de otras veces, en donde tenía más libertad de movimiento y encontrarme con otros músicos, acá estuve encerrada componiendo”.
– ¿En qué te inspiraste para hacer la composición?
-En la película primero que nada. Y, en realidad, es como un trabajo más minucioso que inspirador, porque no es como componer una canción que te inspiras, sino que es tener un diálogo con el director y escuchar qué es lo que quiere decir emocionalmente en cada escena. Cuando veamos la película, vas a ver que tiene componentes muy fantásticos. Además es muy de ciencia ficción, me basé un poco en el género para elegir los sonidos sobre todo.
– ¿Cómo fue el proceso de creación?
-Fue raro, porque fue todo durante la pandemia. A diferencia de otras veces que compuse para pelis, en donde tenía más libertad de movimiento y encontrarme con otros músicos, acá estuve encerrada componiendo. Fue como una especie de clínica intensivas de componer todo el día. Fue intenso como todo este año. Noches sin dormir, y de repente me involucro mucho más con la peli. Porque no tenía ninguna otra actividad, entonces era como estar metida con la película las 24 horas.
– ¿Qué sentimiento buscaste causarle al espectador?
-Va cambiando mucho dependiendo lo que me parece que la escena tiene que generar. En esta peli, intenté que tenga un componente extraño y de tensión. O sea, tener la sensación de que está pasando algo raro, pero no sabemos qué es. Sin delatar demasiado, sino que quede en un lugar sutil, porque la película es así. Entonces yo tomé ese misterio enigmático y tenso. En algunas escenas, eso cambia y es más emocional, nostálgico. También es una película con mucha nostalgia.
– ¿Qué simboliza que la hayan elegido para presentar en el cierre del Festival en Capital?
-Me da una alegría enorme, porque pensábamos que no la íbamos a poder ver en pantalla grande. Es una peli para la pantalla grande y amo ver cine así. Tener la posibilidad de estar frente a esto me parece buenísimo, y me parece que es una experiencia importante en el cine porque sino es como ver Netflix en tu casa. La sensación de ir al cine, sentarte y mirarla hasta que termine.
– ¿Me dirías tres razones para ver Inmortal?
-Una razón es que poder ver una película de ciencia ficción argentina es súper valioso, porque no es un género que se haga mucho. Otra porque capta también una esencia de la ciudad de Buenos Aires que a mí me encanta; hay barrios de Buenos Aires y amor por el barrio. Y, por último, porque propone al espectador que reflexione sobre la muerte, extrañar a los seres queridos y sobre la inmortalidad, si estaría bueno o no ser inmortal; abre todo ese mundo filosófico que me parece que está buenísimo.