En la serie de Luis Miguel se puso en la piel de Hugo López, el Manager del cantante; está próximo a filmar dos películas en el exterior, y en estos días veremos su incorporación en “Campanas en la Noche”. “Cine Argentino Hoy” entrevistó a César Bordón, el prestigioso actor de reconocimiento internacional, con quien hablamos de todo: desde cómo será el personaje de Bartolomé, el abogado que buscará salvar a Vito (Esteban Lamothe) de la cárcel; su relación con la televisión; sus proyectos; hasta qué diría si le proponen participar de la segunda temporada de la serie mexicana más resonante de los últimos tiempos. En exclusiva, una nota imperdible con César Bordón. por Andrea Reyes
¿Cómo será tu personaje en “Campanas en la noche”?
Yo voy como un invitado especial para cerrar el ciclo de “Campanas en la Noche”. Hago los últimos diez capítulos. Aparezco a partir del capítulo 71 hasta el 80 que termina la novela. Es inminente. Hago de un abogado (Bartolomé) que lo defiende a Lamothe (Vito) en sus instancias finales.
Entonces, digamos que haces de un abogado que se pone del lado de los malos…
¡Claro! Un buitre, un águila negra. Un tipo sumamente prestigio, hábil. Capaz de cualquier cosa. Esa es la función del personaje en el momento más álgido de la novela.
¿Y este abogado es tan eficaz como para lograr que liberen a Vito (Esteban Lamothe)?
Te podría decir solamente que está dispuesto a todo para lograr lo que su cliente quiere, que me parece que es un buen dato que incluso puede ser interesante dentro o fuera de lo judicial. Está muy bien el personaje, muy álgida la novela y supongo que tendré buena acogida del público, más teniendo en cuenta que Telefé me quiere y me convoca siempre para personajes. Yo no quiero hacer mucha tele: el año pasado estuve en “Morir de Amor” y ahora me ofrecieron esto y yo prefiero ir un mes, grabar e irme; es que yo estoy más para el lado del cine.
“Te podría decir solamente que está dispuesto a todo para lograr lo que su cliente quiere, que me parece que es un buen dato que incluso puede ser interesante dentro o fuera de lo judicial”.
¿Y tenés otro proyecto en puerta para televisión?
No, con respecto a televisión no. Tengo sí, algunas proyecciones con respecto a hacer series, más bien fuera el país. Porque por suerte, tengo siempre las ventanas internacionales y está medio revolucionado. En la Argentina la tele me gusta mucho, pero es un gran esfuerzo.
¿Te gustaría, por ejemplo, hacer una participación en “El Marginal”?
La verdad que puntualmente en esa no tanto, porque ya es el tercer lanzamiento y lo interesante hubiera sido participar en la primera. Estoy más cerca de trabajar en “Narcos” que de trabajar en el “El Marginal”, entonces me inclino para ese lado. Lo que sí hice el año pasado fue “Un Gallo para Esculapio” con Underground, que ahí si tuve un personaje que se desarrolló durante un par de meses, así que ahí de los ocho capítulos, no estuve en uno solo; ahí sí fue una participación jugosa y estuvo bien. Pero, no nos olvidemos que también es una serie, y entonces tiene determinada cantidad de capítulos. Lo que yo digo con la televisión, es que le escapo un poco de la cosa de la tira.
“Lo que yo digo con la televisión, es que le escapo un poco de la cosa de la tira”.
Claro, comprometerte casi un año entero a un solo producto…
Exactamente, porque además yo soy medio golondrina y tengo la posibilidad de hacer otras cosas. Ahora me voy a hacer una película el mes que viene a Bolivia, después me voy a hacer otra a Brasil y creo que después me voy a México. Entonces, tengo como armado los sectores por bimestre, por trimestre, y me resulta más cómoda. Entonces esa es más o menos la proyección que tengo.
“Yo soy medio golondrina y tengo la posibilidad de hacer otras cosas”.
¿Y cómo surgió la propuesta de sumarte a “Campanas en la noche”?
Me venían llamando de Telefé, ya me había llamado para “Morir de Amor” ni bien terminaba “Un Gallo para Esculapio”. No olvidemos que también “Morir de Amor” lo dirige una directora de cine, que es Anahí Berneri. Después me dijeron si quería hacer una participación en “Campanas en la Noche”, me lo dijeron como en la mitad de la tira: yo les comenté que si era una participación especial, linda, con gusto lo hacía; pero me gustaba ser un invitado, no meterme en la tira. Así que me dijeron que si surgía algún personaje… o lo escribieron pensando en que yo lo podía hacer, no sé bien cómo se dio, y cuando ya estaba, empezamos a arreglar los términos para ver si podía sumarme en esos últimos capítulos, que además me parecía que estaba bueno hacer el cierre de la tira; y bueno, acepté y trabajé muy bien. Se trabaja muy bien, se trabaja muy expeditivo, que yo no estaba acostumbrado. Con el director hablamos mucho, y los compañeros estaban muy halagados.
“Me parecía que estaba bueno hacer el cierre de la tira; y bueno, acepté y trabajé muy bien. Se trabaja muy bien, se trabaja muy expeditivo, que yo no estaba acostumbrado. Con el director hablamos mucho, y los compañeros estaban muy halagados”.
Te incorporaste a un elenco que viene rodando hace rato, y es como incorporarse a un equipo ya armado. Esa cosa de cómo uno se lleva con los demás actores, los técnicos…
Exactamente y está muy bien el funcionamiento. Me sorprendí un poco de que son más rápidos, se hace una escena y se hace una vez, y si está bien queda grabada. Una cosa a la que yo estoy un poco desacostumbrado, pero la verdad, por suerte, los compañeros me conocen, me re conocen, me saludaron con cariño y demás; y fundamentalmente las escenas, la mayoría de ellas al menos, estuve con Eugenia Tobal, con Rubén Stella, que son actores que a mí me gustan. Pero además la mayoría de las escenas las tengo con Esteban Lamothe (Vito), que además hice de su padre en “El 5 de Talleres”, o sea que teníamos muy buena onda.
Qué bueno reencontrarse con compañeros, cuando uno la pasó bien y volver a tener proyectos con los cuales compartís. Eso está buenísimo…
Si además Esteban (Lamothe) es un tipo que yo aprecio mucho. Está fantástico en la tira. Es un actor muy moderado, trabaja con una economía de recursos que a mí me gusta mucho y me parece que es un tipo que ha rumbeado bien, y es una persona que quiero.
“Esteban (Lamothe) es un tipo que yo aprecio mucho. Está fantástico en la tira”.
(Esteban Lamothe) viene creciendo mucho también…
Eso es lo que me gusta…, me pasó también con Peter Lanzani, yo trabajé con él en “Casi Ángeles” ya hace años, y ahora lo vi en “Un gallo para Esculapio” y el otro día en “4 x 4”… Hay actores y actrices que tienen un momento de exposición, un momento de fama, o son galanes, modelos o lo que fuese, y con eso se quedan en la frivolidad, o se ponen a trabajar para lograr otro objetivo a partir de eso: se preocupan en trabajar, en mejorar… y eso me causa mucha admiración, y Lamothe me parece que es parte de este fenómeno.
¿Y qué es lo que más te gustó de este personaje? Porque me imagino que un actor de tu trayectoria, que básicamente puede elegir qué sí y qué no, debe haberse encantado por lo que le proponen: el guión, el personaje, para decir “bueno, lo hago”.
Si, los abogados o los personajes cuestionados son muy interesantes porque están en una línea que no sabes exactamente de qué lado están. Y me parece que éste (Bartolomé), es un abogado que está entre dos aguas como viendo de qué lado se para –si bien ya toma un caso complicado- y cómo lleva adelante una cuestión que está cayendo fuertemente sobre el personaje de Lamothe (Vito) a ver si realmente lo negocia o no, y bueno empieza ahí el desarrollo del personaje que es un poco lo interesante, que esta dualidad entre la ética y la moral del personaje.
“Los abogados o los personajes cuestionados son muy interesantes porque están en una línea que no sabes exactamente de qué lado están”.
En general, ¿qué tipo de personajes te gustan interpretar? ¿Villano, bueno…?
Para ser honesto, lo que más me gusta es poder cubrir varios de los roles. Siempre doy la comparación que después de hacer “Relatos Salvajes” me llamen de México para hacer el representante de Luis Miguel, que es un amor, un tipo cariñoso, paternal, que todo el mundo quiere. El privilegio, precisamente es ese, poder hacer uno y otro, y me parece que en definitiva es el trabajo del actor. Después de eso, los villanos son muy divertidos. Yo tengo el privilegio de que me llaman para hacer personajes diferentes. La verdad que lo me gusta es poder transitarlo. Después en su momento, con cada uno, a ver con “El Tío”, yo disfruté muchísimo ese rol porque era una cuestión que -siempre digo- es el personaje que no lleva a la acción, sino que la acción lo lleva a él. En una cuestión que ni siquiera yo en mi vida soy así. En fin, me meto mucho en lo que hago cada vez y no estoy pensando en lo que voy a hacer la próxima, así que disfruto cada uno, y cada uno tiene cosas que siempre tengo que aprender. Así que un poco, transitar todo es lo que más me divierte.
“Yo tengo el privilegio de que me llaman para hacer personajes diferentes”.
Y con respecto a tus personajes, leí en una nota que te han parado en la calle para preguntarte -a partir de tu rol como Manager de Luis Miguel- si conociste verdaderamente al ídolo y si estaba vivo, y que vos te sorprendiste. ¿Cómo vivís que te pase esto?
Una ficción de esa naturaleza, que tiene tanta llegada a tantos lugares del mundo y la vieron tantos millones y millones de personales alrededor del mundo, así como te reciben un montón de halagos y reconocimientos, también te tocan un montón de casos exóticos. Propuestas de todo tipo. Evidentemente, vivimos en un mundo donde la gente anda muy confundida. Esto de la señora me quedó muy grabado, porque me decía: “Señor yo no voy a decir nada, ¿pero ese señor al que usted representa está muerto?” Entonces, la confusión es total porque, por un lado me está preguntando por el Luis Miguel real, cuando yo en realidad hago una cuestión de ficción sobre la vida de Luis Miguel, pero sin él; y por otro lado, como si yo supiera algo de la vida real de Luis Miguel… Es como todo muy confuso. Otra cosa muy curiosa que me pasó, y no una, dos o tres, fue que me propusieron si los podía representar para músicos… Igual, hay que ver en qué contexto, por ahí no vio la tira, que se yo, pueden haber veinte mil posibilidades; pero el tema es cómo uno recibe si alguien te dice si está muerto, el otro si lo representas…
Y cuando te sumaste a este proyecto, ¿conocías pormenores de la vida de Luis Miguel?
No, de su vida personal te diría que nada. De hecho, las noticias vinculadas a su vida personal no me llamaron la atención y nunca me he detenido en ellas. Ni de Luis Miguel ni de nadie. Siempre he defendido la vida personal del otro, como la vida personal del otro; y tratar de disfrutar del artista… lo que haga después del escenario… Van Gogh si no se hubiese cortado una oreja y no hubiese estado con prostitutas qué hubiese hecho, y posiblemente no hubiese sido Van Gogh. Lo pongo bien lejano en el tiempo para poder decir que un artista es todo lo que es con su vida personal y con su arte. No está separado.
“Las noticias vinculadas a su vida personal no me llamaron la atención y nunca me he detenido en ellas. Ni de Luis Miguel ni de nadie”.
No es el caso de Luis Miguel que siempre fue bastante cuidadoso con el hecho de proteger su privacidad; pero hay muchas figuras de las que se conoce más su vida privada, que lo que hacen artísticamente. Tal vez por eso surgen las inquietudes y fantasías del público…
No sé, también las fantasías del público surgen a partir de que él se dedica a develar su vida en una serie, entonces cualquier cosa que se hablase está ahí. En México también pasé ese fenómeno y se habló siempre mucho y se cortó mucha leña sobre la vida de Luis Miguel. Entonces, me parece que de alguna manera, lo que hizo él fue, por un lado blanquear, y por el otro lado, mostrar comercialmente todo eso que la gente tenía interés de saber. Con respecto al otro punto que decías, que de muchos se sabe más de su vida personal que lo otro. Me parece que también hay un estilo, que no es el mío ni el de Luis Miguel, que es el de explotar la vida personal más que la vida profesional. Abrís el Wikipedia y te dice con quién estuvo casado, el nombre de los hijos, en fin, hay como una información personal. Pero de ahí a que uno explote su vida personal es otro punto y me parece que tiene que ver con una decisión personal.
Por supuesto, sí, porque así como uno conoce todo de algunas figuras, de otras sabes lo mínimo. Lo cual está bien, ya que lo tenés que conocer por su condición artística más que por su vida personal…
Esa sería la idea, pero bueno, hay mucha gente que le interesa y hay mucha gente que no le importa nada con tal de tener cierta repercusión. Son carreras, tampoco tengo una crítica para eso, pero me parece que son carreras.
Por último, sé que hay un contrato de confidencialidad y que no podes adelantarnos si va a ver una segunda temporada de la serie de Luis Miguel, pero si hubiera una segunda temporada, ¿te gustaría participar de ella?
Sí, me encantaría (Risas).
