“El Proyecto Adam” de Shawn Levy. Crítica.

El 11 de marzo la plataforma de streaming estrella, Netflix, estrenó el nuevo largometraje de Shawn Levy, el director de “Una noche en el museo” (2006) y la reciente “Free Guy: Tomando el control” (2021). Con Ryan Reynolds y el pequeño y encantador Walker Scobell como protagonistas, “El Proyecto Adam” (2022) presenta una fascinante aventura de viajes en el tiempo, que transcurre en tres distintos años: 2018, 2022, y 2050.

Adam Reed (Walker Scobell) es un niño de 12 años que vive con su madre, con quien tiene una difícil relación. Acaba de perder a su padre en un accidente, pasa su tiempo en solitario y sufre bullying en la escuela. Una noche, se presenta en su casa un misterioso hombre herido que parece saberlo todo acerca de Adam y su vida. Tras unas pocas escenas, el niño se da cuenta de que se trata de otra versión de sí mismo, pero que proviene del futuro. 

Adam (Ryan Reynolds) viajó al pasado desde el año 2050 con una misión: encontrar a su esposa, Laura (Zoe Saldaña), quien nunca regresó a su tiempo luego de viajar misteriosamente al año 2018. Tras un inicio algo apresurado (el niño acepta con una facilidad sorprendente que su “yo” del futuro lo haya visitado), ambas versiones de Adam se lanzan juntos a la aventura de encontrar a Laura, aunque en el camino descubrirán que lidian con inconvenientes mucho mayores y peligrosos.

La dupla que conforman Reynolds y el carismático Scobell es realmente cautivadora. Durante la odisea, se encontrarán con su padre, Louis Reed, interpretado por el maravilloso Mark Ruffalo. El padre de Adam es además el responsable del descubrimiento de los viajes en el tiempo, y el único que sabe cómo funcionan. A pesar de no tener demasiado tiempo en pantalla, Ruffalo realiza una sentida interpretación, central para la película. El elenco se completa con Jennifer Garner y Catherine Keener, dos grandes actrices pero cuyos papeles no alcanzan a desarrollarse demasiado.

A lo largo de una hora y 45 minutos, los protagonistas se ven involucrados en una atrapante aventura con impresionantes escenas de acción y fantasía, pero que deja también lugar para las situaciones cómicas e insólitas. Tampoco queda fuera el factor emotivo, y es posible que a más de un espectador se le caiga una lágrima cerca del final o se enternezca con la interpretación del pequeño Scobell. A pesar de lo complejo del tema que introduce la película, el guion (a cargo de Jennifer Flackett, Mark Levin, T.S. Nowlin y Jonathan Tropper) la hace comprensible y disfrutable para todas las edades.

“El Proyecto Adam” (2022) introduce una aventura a través del tiempo, repleta de acción, peligro y persecuciones, pero con la cuota justa de comedia y ternura. Junto a un gran despliegue visual, la dupla conformada por Ryan Reynolds y el joven Walker Scobell invita a dejarse guiar por este alocado universo de viajes en el tiempo, que recuerda por momentos a clásicos de los años 80´ como “Volver al Futuro” (1985) o “The Terminator” (1984).