Netflix presento el 9 de julio su segunda entrega dirigida por Christian Ditter quien vuelve a mostrar una historia de misterio renovada para la expectativa de todos sus seguidores.
La serie alemana que mezcla suspenso, y biotecnología, muestra a Mía Akerlund después de haber vencido a la Dra. Tanja Lorenz. La protagonista se despierta en un salón de clases de laboratorio sin recordar nada, y con un intenso dolor de cabeza. En un universo desconocido empezara un recorrido desesperado por recuperar los recuerdos de sus últimos 3 meses
La segunda temporada permite al espectador genera un nuevo interés en la narrativa, que empieza desde el primer momento con sus recursos de misterio. Donde la protagonista se encuentra aturdida ante un mundo completamente cambiado, y el cual es confirmado por todos los factores externos. Lo que hace de un relato atrayente, gracias a la nueva y ingeniosa problemática que se presenta para esta etapa de la serie.
Sin duda un tema así logra expectativa por parte de sus seguidores. Que se podrán preguntar qué pasaría si alguien se encontrara frente a un universo con significados diferentes a aquel que recuerdan, ocasionado por la falta de memoria y cambio aparente de la personalidad en ese tiempo.
Pero a medida que la historia avanza, y sale de ese aturdimiento inicial, se empiezan a descubrir otros elementos que generan un salto de calidad. Desde los misterios científicos e innovaciones, hasta la introducción de un nuevo antagonista que parece aun más peligroso que en la temporada anterior, provocan casi el mismo efecto que tuvo su primera parte.
La narrativa vuelve a tener a los personajes más protagónicos de Luna Wedler (Mia Akerlund) y Jessica Schwarz (Tanja Lorenz), pero esta vez deberán aliarse para combatir a un enemigo en común. Que las pondrá en peligro en muchas partes de la serie.
En conclusión, “Biohackers” presenta una segunda entrega que renueva el misterio y el suspenso de la primera. La cual permite al espectador volver a engancharse de manera inmediata después de tanto tiempo, gracias a los grandes elementos introducidos en la filmación.
Actuación - 80%
Dirección - 85%
Montaje - 70%
Música - 70%
Guion - 90%
79%
Sin duda el hecho de poder renovar de un aire nuevo a esta segunda parte es algo muy difícil e importante para la continuidad de una historia.