A fines de la primera década de los 2000s se estrenaba “Taken” protagonizada por, un ya entrado en años, Liam Neeson. El éxito de la película desató una Nielsonmania imparable, con el actor protagonizando más de una docena de blockbusters de acción. El próximo jueves 9 de septiembre, ya muchos años después de todo esto, se estrena “Venganza implacable” de Mark Williams. Que si bien busca darle un cuarto de vuelta más a esta rosca interminable, nos hace preguntarnos, ¿cuántas veces más se puede recalentar la cena?
Tras muchos años de robar bancos exitosamente, sin víctimas ni rastros que puedan incriminarlo, Tom Dollan decide entregarse al FBI. Esto se debe a que conoció a Anni Wilkins, flechado por cupido, decide comenzar desde cero de manera honesta. Pero los agentes que deberían encarcelarlo, son mucho más corruptos que él y terminan por traicionarlo. Si algo nos enseña la historia del cine moderno, es que no tenes que hacer enojar a Liam Neeson.
La premisa que a priori pareciera ser interesante, ladrón honesto, decide entregarse ya que no puede seguir mintiéndole a su enamorada. Termina siendo una especie de Robin Hood y nadie nunca está en contra de Robin Hood. El viejo debe luchar contra el joven, equiparando la destreza física de este último con una aguda astucia e inteligencia adquirida con los años. Pero a medida que avanza la trama, se va desinflando hasta convertirse en algo estándar, del montón.
De todas maneras se puede destacar la perspectiva con la que eligen representar la relación de Tom y Anni. Dos personas con varios años en la mochila, relaciones fallidas, que ya no esperan nada del amor. Aun así se conocen y comienzan una relación amorosa, retratada de manera cariñosa y amable. No son dos enamorados lujuriosos, no porque el cuerpo no les de, Tom cae de un segundo piso y apenas acusa recibo, sino que apelan al compañerismo y al apoyo en el otro sobre lo demás.
“Venganza implacable” de Mark Williams se queda incómodamente en el medio en todos sus aspectos. No es una película de acción espectacular, ni una que nos haga reflexionar y mucho menos que nos sorprenda con un guión por demás predecible. Por lo tanto, ninguna de las partes que la integran se lucen, inclusive con un Liam Neeson aceptable. Si bien su visualización no se sufre, tampoco se recuerda por mucho tiempo.
Calificación.
Dirección
Montaje
Arte y Fotografia
Música
Actuación
“Venganza implacable” de Mark Williams se queda incómodamente en el medio en todos sus aspectos. No es una película de acción espectacular, ni una que nos haga reflexionar y mucho menos que nos sorprenda con un guión por demás predecible. Por lo tanto, ninguna de las partes que la integran se lucen, inclusive con un Liam Nielson aceptable. Si bien su visualización no se sufre, tampoco se recuerda por mucho tiempo.
