“Varsavsky. El científico rebelde”, de Rodolfo Petriz. Crítica

“Varsavsky. El científico rebelde”, el documental dirigido por Rodolfo Petriz tuvo su pre-estreno el 29 de mayo, en el marco de la 12° Edición del Festival Internacional de Cine Político (FICIP) que tuvo lugar entre 24 y el 31 de mayo. En el festival, formó parte de la Selección Ofical en la Competencia Argentina. Su estreno en salas será el jueves 15 de junio en Cine Gaumont (Avenida Rivadavia 1635, CABA). 

Comienza el documental y un periodista, Rodolfo Petriz, quien leyendo un libro de Marcelino Cerejido, ‘La nuca de Houssay’, se encuentra con un pasaje en el que el autor se refiere a un tal Varsavsky, quien parece tener una visión algo particular de la ciencia. Petriz llama a Cerejido por videollamada. Esa videollamada lo llevará a un viaje inesperado por la ciencia y por la historia de la segunda parte del siglo XX de nuestro país.

Según Cerejido, en los 60s, no había laboratorio en Argentina que no discutiera las provocadoras propuestas sobre ciencia del matemático y pionero de la computación Oscar Varsavsky, uno de los miembros más destacados de la gestión de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la UBA durante la llamada ‘época de oro’. Su curiosidad, lleva a Petriz a conectarse con muchas personas; desde gente que investiga en la universidad con la intención de profundizar en las ideas de Varsavsky y estudiarlas desde el presente, a personas que conocieron muy de cerca al científico y, por tanto, pueden dar testimonio de su vida, de sus logros y fracasos, pero sobre todo, de sus ideales. Revolver el pasado en busca del pensamiento de ese científico que le resulta enigmático, llevará a Petriz a revisar la historia de los 60s y los 70s, para repensar una época tan convulsionada tanto para nuestro país como para el resto de America Latina.

El documental, nos recuerda la importancia de revisitar, desde el presente, las ideas de pensadores y cientificos como Varsavsky, para ponerlas en perspectiva y poder comprender críticamente y más en profundidad nuestra realidad que, como país ‘del sur’, hoy nos toca vivir. Lo que comienza con una indagación por conocer quién fue el científico, nos remonta a una vida en la que la intelectualidad y la lucha fueron de la mano. En su investigación, Petriz no solo descubre una mente matemática brillante, sino una persona preocupada por el cambio social, muy comprometida e interesada por una verdadera ciencia para América Latina. ‘Varsavsky. El científico rebelde’ no solo nos hará reflexionar sobre la función social de la ciencia, sino que replantea el concepto de subdesarrollo y de progreso científico, a la vez que reafirma y nos recuerda la relevancia de construir lazos entre los pueblos de América Latina.

El documental maneja una narrativa en la que el descubrimiento de lo oculto y la verdad resultan centrales. El viaje personal de Petriz se vuelve una búsqueda colectiva por un pasado que aun se encuentra muy vivo en nuestro pais, para reivindicar aquello que fue revolucionario en su tiempo y poder ponerlo en perspectiva en el presente y hacia el futuro. La narrativa, muy correcta para un documental que se construye a partir de aquello que fue olvidado y de aquellos pensamientos perdidos, se funde muy adecuadamente con una puesta en escena bastante simple ,aunque poética, en la que será muy fácil seguirle los pasos a Petriz mientras construye el perfil del científico. A la incógnica por su vida y por su pensamiento, se le suma el secreto de la fisonomía, el rostro y la voz del mismo Varsavsky, lo cual resulta en una metáfora por la búsqueda de identidad…

Veremos a Petriz en diferentes momentos: desde el trabajo solitario de rastreo de datos en su computadora, a la discusión con un grupo de científicos y científicas de la universidad y a sus charlas y encuentros con quienes fueron personas allegadas a Varsavsky. Al respecto, si bien el film maneja un formato de entrevista bastante clásico, narrativa y estéticamente, se vuelve muy íntimo, puesto que las personas entrevistadas parecen muy relajadas y cómodas dando su testimonio en sus hogares y sus sitios de trabajo. Petriz aparece hablando con ellas, por lo que todo transcurre desde la cotideaneidad, donde la espontaneidad tiene una lugar muy relevante. En todo el viaje que propone el documental, la contraposición y el contraste de realidades es central, puesto que a la vez que vemos la vida universitaria, la cámara también se atreve a mostrarnos muy explícitamente realidades mucho más crudas de nuestro país que nos advierten que Varsavsky estaba en lo correcto cuando reflexionaba sobre una ciencia para America Latina. La música, algo frenética, le aporta esa excentricidad que tiene la vida de todo científico.

De lo expuesto, “Varsavsky. El científico rebelde”, no solo reivindica la figura del científico y sus aportes al pensamiento argentino y latinoamericano, sino que es mucho más que eso. Lo oculto, lo omitido, lo renegado, tienen un lugar central en todo el relato a través de la búsqueda de respuestas no solo sobre la vida del propio científico, sino también de la verdad, para develar algunas las estragegias para la dominación de los pueblos. Así, el documental resulta en una reflexión sobre la importancia de mirarnos a nosotros/as mismos/as para poder revalorar lo propio, buscar soluciones para nuestros propios problemas sociales e identificar caminos propios y genuinos.

FICHA TÉCNICA:

Guión, Producción y Dirección: Rodolfo Petriz – Testimonios: Carlos Borches, Cristina Mantegari, Gabriel Bilmes, Guido Riccono, Florencia Faierman, Carlos de Senna – Figueiredo, Irene Spivacow, Matías Blaustein – Dirección de Fotografía: Rodrigo Sánchez Mariño – Montaje: Rodrigo Sánchez Mariño, Rodolfo Petriz  – Diseño Sonoro y Música Original: Rodrigo Sánchez Mariño – Diseño de Arte y Utilería: Armando Fogel  – Compañías productoras: DOKEMA Cine Documental y Estudio NO-FI – Apoyos: INCAA y Mecenazgo