La segunda película de Nicole Costa como directora se encuentra programada en la Competencia Latinoamericana de Largometrajes del Festival Asterisco, Festival Internacional de Cine LGBTIQ+. Es una de las dos participantes chilenas, la otra es Los fuertes de Omar Zúñiga. Aquí Nicole narra sin escatimar detalles ni poesía, la vida y obra de Ivan Monalisa Ojeda.
Luego de la larga dictadura militar de Pinochet, Iván se muda a Estados Unidos por una beca de estudios. Es obnubilado por las luces de las ciudad y la libertad que brindaba la Nueva York de los noventa. Encontrándose allí con Monalisa, su otra mitad que sin saberlo lo esperaba en esas tierras, termina viviendo de noche y durmiendo de día. Trabaja en las calles desde que las primeras luces de neón se encienden y anota todo en un cuaderno lleno de experiencias, que luego se convertirían en el material de su primer libro publicado.
Todo comienza con un viaje, primero el de Iván a finales del siglo pasado seguido por el realizado por la directora a la gran manzana años después. Al igual que Monalisa, Nicole Costa se encuentra sin quererlo con algo que no buscaba, Serendipia. Al intentar reencontrarse con su compañero de teatro, desemboca en una historia que grita por ser contada. No encontró a la misma persona que había dejado el golpeado Chile. Mutado, transformado por sus años de experiencia, Iván ya no es sólo Iván, en su cuerpo también habita Monalisa. En palabras de su protagonista, “two spirits transgender”.
Así comienza esta reconstrucción de los años pasados en las calles de Nueva York. La historia se cuenta toda tal cual fue, tal cual es. Los buenos momentos, las amistades y la libertad de ser quien es. Esto sin dejar de relatar los malos, las consecuencias del libertinaje y sus resultados. “Una puta sin coca no es puta”, aclara una voz anónima en el documental. Al fin y al cabo, Iván Monalisa es quien es por dichas vivencias. Tal como declara en un momento: “Cuando estas en los lugares negros, cuando has vivido en los lugares negros, y cuando has leído de los lugares negros, te das cuenta que la cosa no es tan negra”.
Acompañada constantemente por la poesía de Monalisa, la autora logra un relato muy consolidado. Sin guardarse nada y aun así no cuenta más que lo justo y necesario. Al igual que su protagonista, Nicole Costa deja al espectador esperando las obras que seguirán al Viaje de Monalisa.
Calificación
Dirección
Montaje
Arte y Fotografia
Música
Acompañada constantemente por la poesía de Monalisa, la autora logra un relato muy consolidado. Sin guardarse nada y aun asi no cuenta más que lo justo y necesario. Al igual que su protagonista, Nicole Costa deja al espectador esperando las obras que seguirán al Viaje de Monalisa.