“Mulher Oceano” de Djin Sganzerla. Crítica.

La brasileña Djin Sganzerla presenta su primer trabajo como directora en la 10° edición del Festival LatinArab. “Mulher Oceano” (2020), o “Mujer Océano”, film que forma parte de la Competencia de Largometrajes Latinoamericanos del festival, narra la historia de dos mujeres desconocidas entre sí, separadas por miles de kilómetros, pero que se conectan a través de un extraño vínculo con el océano. 

Hannah es una mujer brasileña que llega a Tokio, Japón, para escribir su próximo libro. Al inicio, se muestra perdida, desinteresada en su trabajo, recorriendo la ciudad sin un rumbo definido. Sin embargo, hay una imagen que resuena en su cabeza y que sabe con seguridad que será clave para el libro que se propone escribir: se trata de una de las últimas imágenes que vio antes de dejar Río de Janeiro, una joven nadadora que entrenaba incansablemente en el mar junto a sus compañeros.

Ana, la nadadora que Hannah vio en la playa, es la otra de las protagonistas, cuya historia se da a conocer ya entrado el film. La joven se encuentra en plena preparación para realizar un difícil desafío de natación en el mar abierto, y conforme el evento se acerca, comienza a atravesar un extraño cambio en su interior, una especie de “llamado” del océano. Hannah, desde Tokio, desarrolla un vínculo con Ana que le permite sentir esta transformación, sobre la cual comienza a escribir. Por momentos, ambas mujeres parecen ser la misma persona.

Djin Sganzerla no sólo dirige el film, sino que interpreta además a ambas protagonistas, quienes sólo se diferencian en su apariencia por su color de cabello. El océano, el pilar fundamental en la conexión entre ambas mujeres, se impone en el largometraje como un personaje más (y uno muy importante) gracias a un logrado trabajo de fotografía. Por momentos el film se acerca al formato documental, desviándose de la historia central para poner el foco en otros vínculos y formas de habitar el océano. 

El más bello y relevante de estos relatos es la historia de las Amas, mujeres japonesas que, desde hace varias generaciones y hasta la actualidad, se dedican a “bucear”, a sumergirse y pescar en el mar, por largas horas y con un equipamiento muy simple. En el film, Hannah visita a estas mujeres para conocer su sacrificado y duro trabajo, pero en la secuencia es una mera y silenciosa espectadora, dejándoles por un rato el protagonismo a las fascinantes Amas.

“Mulher Oceano” es la historia de dos mujeres desconocidas, una en Tokio y una en Río de Janeiro, una escritora y una nadadora, a quienes una fuerza proveniente del océano conecta y atraviesa profundamente. Una historia (o dos) de transformación, de introspección, de búsqueda interior. Con tintes de fantasía, sutiles en su ejecución pero fundamentales para la historia, y el océano como un tercer protagonista, Djin Sganzerla cuenta una historia pequeña, íntima, algo confusa, pero que no por eso deja de ser atrapante.