“La Calle del Terror: Parte 3 (1666). Crítica

La trilogía de La Calle del Terror llegó a su fin y termina con la maldición que perjudicaba a todos los habitantes de Shadyside.

En 1666 comienza una cacería de brujas en una colonia y esta da con el origen de la maldición en lo que es actualmente Shadyside. De vuelta a 1994, Deena, Josh, Ziggy y Martin tratan de salvar a Samantha y descubrir la verdad sobre los atroces acontecimientos en su pueblo, revelando un secreto aún más oscuro. 

A la caza de la maldición

En esta tercera parte, se retrocede en el tiempo hasta 1666, donde se dio la primera tragedia en lo que es ahora Shadyside. Revelando a la primera persona en enloquecer y asesinar a casi todos los niños de la colonia.

Deena, logra entrar al cuerpo de Sarah Fier y se le revela una serie de acontecimientos que traen consigo una revelación enorme, para así poder acabar con el mal que acecha a los shadysiders hasta 1994.

Un secreto bien guardado

Tal y como nos dejan una pestaña abierta en su segunda parte, al parecer Sunnyvale también tiene algunos secretos que esconder y la vuelta a 1666 revela la razón por la cual el pueblo vecino parece una tierra de ensueño, mientras que Shadyside sufre las peores calamidades.

Varios personajes están conectados desde 1666 a 1994 dando así con la maldición que recae sobre todas las victimas de los asesinatos.

Mismas caras, diferentes personajes

En La Calle del terror: Parte 3 (1666), se usaron los mismos actores que estuvieron tanto en 1994, como en 1978. Esto lleva a que se conecten con los antepasados de algunos y/o se los utilice nuevamente para no confundir al espectador.

En un caso en particular, el de Sarah Fier, que es interpretado por Kiana Maderia, quien también encarna a Deena, muestran que en realidad ella está en el cuerpo de Sarah viendo todo lo que sucedió en la colonia. Al resto de los personajes, Deena los ve como sus conocidos debido a la relación que tenían esas personas con Sarah en el pasado, mostrando cuando ella puede ver el reflejo de la verdadera Sarah Fier en el agua. Esto significa que nuestra protagonista ve a los conocidos de Sara igual a los suyos. 

Revelaciones

De vuelta a 1994, todos los secretos sobre la maldición quedan revelados, lo cual probablemente sorprenda y al mismo tiempo no. Es un cierre satisfactorio, con todos los elementos clásicos de las películas de terror de época y que dejan una solapa abierta para lo que puede ser una cuarta parte.

Esta tercera entrega está dividida en dos episodios, por lo tanto, pueden ser tranquilamente dos películas dentro de una. Esto remarca mucho el estilo de Leigh Janiak a la hora de separar las películas en partes como si fuera una serie.

Para cerrar

La trilogía de La Calle del Terror funciona plenamente, juega con el cine Slayer y revive al cine de terror setentero y noventero. Fue una gran idea ir sacando películas semana tras semana, lo que provoca que el espectador no pierda el interés en ella. 

Maneja bien el elemento de la ambientación y las épocas quedan muy bien remarcadas. Los personajes de terror, aunque sean reciclados de míticas sagas, hacen justicia a La Calle del Terror y es una buena trilogía que utilizó estas tres semanas de julio, para que hagamos una inmersión al mundo del terror clásico y de suspenso. 

La tercera parte pudo haber sido tan buena como la anteriores, pero le falto algo de fuerza para ser el cierre. De todas formas, sabiendo que es la entrega para finalizar, no está mal, pero pudo haber estado mejor.