Crítica de “Comunión con el diablo”

Una película de Víctor Garcían

El próximo jueves 16 de marzo llega a la cartelera argentina: “Comunión con el diablo”, una nueva propuesta de terror sobrenatural de producción española, pero constituida sobre las bases del cine americano, de la mano del director Víctor Garcían y protagonizada por los jóvenes intérpretes: Carla Campra, Aina Quiñones, Marc Soler y Carlos Oviedo.

La historia transcurre durante los años ochenta, en un pequeño pueblo, no definido, que desde el inicio del film mediante la presentación de algunos personajes y escenarios expuestos, parece liberar una atmósfera extraña y misteriosa. Allí Sara (Carla Campra) recién llegada junto a sus padres y su hermana menor debe lidiar con un recibimiento bastante hostil por parte de los habitantes del lugar.

Su primera amistad se dará con Rebe (Aina Quiñones), una chica de su edad, extrovertida que enfrenta sin problemas a los pueblerinos hipócritas del lugar. Rebe la acompañará a descubrir los diferentes sitios del pueblo, le presentará nuevos amigos y la pondrá al tanto de historias extrañas que viven en los residentes y que se han convertido en leyenda.

Una noche a la salida de una fiesta, luego de mucho alcohol y algunas drogas, se encuentran con una muñeca vestida de blanco tirada en un bosque. Algo totalmente insignificante si no se tiene en cuenta aquel mito que narra la desaparición de una niña y su muñeca justo en el día de su comunión. Suceso más que extraño que será acompañado, un día después, por el surgimiento de unas curiosas manchas que brotarán en el cuerpo de las protagonistas.

En este sentido, las amigas deberán ir en busca de explicaciones: ¿Qué son esas manchas? ¿Qué sucedió con la niña desaparecida? Para eso tendrán que sumergirse de forma valiente en esa leyenda rural de la que algunos hablan y otros como el sacerdote del pueblo pretenden esconder. Será el momento de enfrentar apariciones fantasmales, que se acontecen sin importar el lugar, como puede ser en un baño, en una sala de videojuegos o en la calle misma. Un ser sobrenatural que ha regresado, pero aún no se entiende el por qué.

En definitiva, una historia de miedo moderado que funciona por su gran trabajo en la narrativa apuntalada en películas del género de la década de los 80, con caras nuevas de virtuosas interpretaciones, que no aspira a ser ambiciosa y que no exagera con la arribada de raros espectros. Una buena película de terror española, que nada tiene que envidiarle a las súper producciones hollywoodenses.

Dirección
Montaje
Arte y Fotografia
Música
Actuación

Una historia de miedo moderado, que funciona por su gran trabajo en la narrativa apuntalada en películas del género de la década de los 80, con caras nuevas de muy buenas interpretaciones, que no pretende ser ambiciosa y que no exagera con la arribada de raros espectros. Una buena película de terror española, que nada tiene que envidiarle a las súper producciones hollywoodenses.

User Rating: 5 ( 1 votes)

Artículos Relacionados

Deja un comentario

Volver al botón superior