“El Hijo” Crítica. El enemigo silencioso

La regla dice que las segundas partes no son tan buenas, excepto en un par de situaciones. Lamentablemente, este no es el caso. El Hijo es un drama de Florian Zeller que se estrena en cines el jueves 23 de marzo.

Nicholas (Zen McGrath) es un joven cuya salud mental empieza a sufrir tras el divorcio de sus padres, Kate (Laura Dern) y Peter (Hugh Jackman), y el nacimiento de su hermanito, quien su papá tuvo con su nueva pareja, Beth (Vanessa Kirby).

Esta es la segunda parte en la trilogía de obras del realizador y dramaturgo Florian Zeller: todo empezó con El Padre (2020), que le valió el Oscar a Mejor Actor a Sir Anthony Hopkins; y terminará con La Madre, de la cual todavía no hay novedades.

Las actuaciones son increíbles: Hugh Jackman entra en un lugar muy oscuro y doloroso para interpretar su papel, lo que hacía imposible no ponerse en sus zapatos. Tanto Laura Dern y Vanessa Kirby son dos actrices que siempre dejan marca por donde pasan y hacen notar su presencia cuando aparecen en pantalla. El rol de Zen McGrath es definitivamente uno de los más complicados de todo el film, y logra una desgarradora interpretación, aunque por momentos un poco forzada. Sin embargo, es con una sola escena que Anthony Hopkins logra robarse toda la película. Una escena. Eso en Argentina se llama “tener cancha”.

Pero más allá de todo esto, no se siente que esté a la altura de su predecesora. El Padre generaba una tensión que esta no, El Hijo tiene una cierta crudeza y simplicidad en su relato que hace que se desplome. Ni la desoladora música de Hans Zimmer puede mover el péndulo hacia el otro lado.

Sin embargo, es imprescindible recordar que la depresión es uno de los temas centrales del film; se muestra cómo afecta, no sólo a la persona que la tiene sino también a su entorno familiar. Es una cuestión muy sensible que se desarrolla a lo largo de la cinta, y por esa razón siempre hay un aura oscura que la rodea. Es necesario que quien esté dispuesto a ver El Hijo, sea consciente de este tema. Es un film bastante duro en ese sentido y puede afectar al espectador.