Muchas veces la vida se trata de saber identificar las oportunidades y aprovecharlas. Muchas veces, la diferencia entre el éxito y el fracaso se resume en ese momento, ese instante de claridad, en el que uno ve lo que tiene en frente y decide hacer algo al respecto. Pero también es cierto que a veces, tener la capacidad para leer las oportunidades, significa saber cuando retirarse, cuando cambiar de carril y buscar otro rumbo.
“El arranque” sigue a un grupo de tres hombres que buscan reactivar una vieja estación de servicio, en una calle destruida por la que no pasa nadie, a las afueras de un pueblo del interior. Y mientras esperan la oportunidad de convertir el negocio en algo de valor, en que pase un cliente, o que los trabajadores corten el nuevo acceso, se pasan el día tomando mate y charlando de lo que quieren hacer de sus vidas.
Sandro, Hugo y Joselo. El primero heredó el fondo de comercio de la estación de servicio. El segundo se quedó con el auto que no arrancaba de su padre. Y el tercero, el más entrado en años, está en silla de ruedas y lo que más desea es que tanto Hugo como Sandro puedan poner en marcha sus vidas. Siempre con asperezas y con mates de por medio, el trío deberá estar listo para actuar cuando la vida les ofrezca una oportunidad.
Sandro busca desesperadamente hacer funcionar la estación de servicio, pensándola como lo único que le queda. Por su lado, Hugo está impaciente de abandonar ese pueblo en el que no pasa nada y donde las oportunidades no existen. Son dos caras de una misma moneda, el que busca adentro y el que busca afuera. De mediador se encuentra Joselo, que hace las veces de figura paterna al mismo tiempo que empuja a los dos para salir adelante.
La película, dirigida por Federico Jacobi y escrita por Pablo Viollaz, es una coproducción Argentina-México, con el apoyo del Municipio de Luján. Tiene una duración total de 70 minutos y su elenco protagonista está conformado por Fabio Herrera, Miguel Ferreira y Gabriel Lenn. Cabe destacar la fotografía de Federico, que logra situar al espectador en medio de ese pueblo rural, y la música de Walter Jacobi y Fabio Herrera, que es simplemente bella.
A manera de cierre queda decir que “El arranque” es un drama solido. Orbita al rededor de un tema potente, con buenas actuaciones y un trabajo técnico que sabe sacar el máximo provecho de todo lo que tiene. Es una obra en la que se nota el corazón y el amor con el que todo está hecho y que en más de una ocasión encuentra la manera de dejarle una enseñanza al espectador.
Calificación
Dirección
Actuación
Fotografía
Música
Guion
"El arranque" es una película muy cumplidora. Un drama bien escrito, con buenos arcos de personajes y buenas actuaciones.