El domingo 2 de abril del año 2013 la ciudad de La Plata sufrió una tragedia que marcó su historia. Luego de una tormenta sin precedentes en la que en pocas horas llovió más del récord mensual registrado, la capital de la Provincia de Buenos Aires quedó bajo el agua. Según los cálculos oficiales 89 personas fallecieron, mientras que muchísimas otras sufrieron grandes pérdidas materiales. “Desamparados bajo el agua”, dirigido por Uriel Fernández, es un documental que busca conocer, desde la voz de las mismas víctimas, cómo fue ese día fatídico.
A través de testimonios de vecinos y varios profesionales locales, se intentan narrar los sucesos. El film presenta dos líneas claras sobre el hecho, en este sentido comienza con una explicación técnica mostrando cómo fue la construcción de la ciudad y brindando datos para entender el por qué sucedió la inundación, para luego continuar con las historias de las personas que ese día vieron cambiar drásticamente su cotidianeidad. Esto es, sin dudas, la parte más rica y emotiva de este proyecto, en donde se pone rostro y nombre a lo que muchas personas vieron únicamente a través de las noticias.
Utilizando recursos como tomas aéreas, materiales de archivo y, por supuesto, los ya mencionados testimonios, el director logra que el público conecte al instante con el film apelando al recuerdo aún fresco. Pero, no solo utiliza este documental para relatar lo sucedido, sino también como canal para visibilizar un reclamo colectivo con el objetivo de que las autoridades realicen las obras necesarias para que no vuelva a repetirse algo similar y, además, poniendo en evidencia la poca acción de los gobernantes y la mano solidaria del pueblo.
“Desamparados bajo el agua” es de esa clase de películas necesarias, que sirven como caja de recuerdos. En una actualidad donde los hechos parecen esfumarse con mucha rapidez, el arte toma la delantera para dejar su huella imborrable.
Calificación
Dirección
Guion
Edición
Fotografía
Sonido
En una actualidad donde los hechos parecen esfumarse con mucha rapidez, el arte toma la delantera para dejar su huella imborrable.