El jueves 1 de junio llega a las salas de cine “Blondi”, con el debut en la dirección de la talentosa actriz Dolores Fonzi. Un relato libre, inteligente y encantador protagonizado por su directora la mencionada Dolores Fonzi, Carla Peterson, Rita Cortese, Leonardo Sbaraglia y Toto Rovito.
El film se sumerge en el dificultoso mundo de los vínculos familiares, con la particularidad de no detenerse en ningún tema en especial, sino en surfear por las diversas cuestiones que surgen a partir de varios lazos como el de una madre y un hijo, las diferencias entre hermanas o la participación de una madre/abuela, a veces interviniendo demasiado donde no se la llama y otras veces evitando involucrarse.
La película se inicia con un virtuoso plano secuencia, que muestra lo justo y necesario para introducir al espectador en la historia. Blondi (Dolores Fonzi) despierta apurada, se levanta de su cama y transita por los distintos sectores de la casa, en ese trayecto se observa primero a alguien durmiendo al lado de ella, después se sabrá que es Mirko (Toto Rovito) su hijo, luego se deja ver a otras personas dormidas entre sillones y el piso, descubriendo más tarde que son amigas y amigos de Mirko, pero también de Blondi.
Madre e hijo además de vivir juntos y a pesar de la diferencia de edad, aunque no es tanta ya que Blondi fue mamá a sus jóvenes 15 años, llevan un vida cotidiana con muchas cosas en común, comparten sus gustos musicales, salidas a boliches, fuman marihuana y beben alcohol. En ese vinculo que por momentos parece confundirse con una relación de amistad, los roles se invierten y Mirko quizás más centrado en sus decisiones insta en mostrarse más adulto que su madre, quien aun no supera ciertas cuestiones del pasado.
De esta manera, los protagonistas acompañados por interpretes de primera línea como lo son Carla Peterson, Rita Cortese y Leonardo Sbaraglia se mueven con enorme naturalidad dentro de un universo que busca profundizar sobre temas tan significativos como universales colmados de complejidades emocionales.
Por tanto, con el transcurso de los minutos y mediante un brillante trabajo actoral, que profundiza y transforma, se logra que el público se sienta identificado y pretenda ubicarse en la posición de cada uno de ellos, reflexionando sus decisiones, acertadas o equivocadas, a veces sintiéndolas como propias y otras veces no, pero nunca con el interés de juzgar.
En esta, su primera película, Fonzi deja su sello: reflejando como pocos a personajes excepcionalmente sensibles exponiendo su maduración y su naturaleza más profunda convocados por historias que giran en torno a problemas de situaciones cotidianas, para dejar en evidencia, su ya reconocido enorme talento como actriz, pero ahora también detrás de cámara.
Mirá la entrevista completa con los protagonistas: Dolores Fonzi y Toto Rovito.
Dirección
Montaje
Arte y Fotografia
Música
Actuación
El film se sumerge en el entramado mundo de los vínculos familiares, con la particularidad de no detenerse en ningún tema en particular, sino en surfear por las diversas cuestiones que surgen a partir de varios lazos como el de una madre y un hijo, las diferencias entre hermanas o la participación de una madre/abuela, a veces interviniendo demasiado donde no se la llama y otras veces evitando involucrarse.