Organizada por la asociación ADN – Asociación de Directores y Productores de Cine Documental Argentino en la 8va Semana del Cine Documental Argentino con la presentación de 9 largometrajes y 10 cortometrajes entre los que se encuentra la obra de Turjanski, que relata la trágica historia de una familia, de buen pasar, de la que cada uno de ellos no soportó la existencia y buscó quitarse la vida. Por Nito Marsiglio.
Mario Gageac escribió una novela autobiográfica titulada “El desierto y su semilla”, donde relata, utilizando seudónimos, la trágica historia de su familia.
Cada uno de ellos, incluso el mismo poco tiempo después de terminar su novela, decidieron quitarse la vida.
El cortometraje de Nicolás Turjanski cuenta la vida del autor de la novela de una manera muy poética.
Son muchos los logros de este cortometraje y para comenzar a enumerarlos partimos del montaje de Francisco Noriega que maneja de manera magistral una síntesis de la crónica del padre de Mario a través de fotografías que van al ritmo de una máquina dactilográfica, la voz en off de Turjanski y la musicalización, absolutamente acorde, de Nahuel Lombardo. La metáfora que va creando con el sonido de cada tecleo de la máquina, con la autobiografía que escribiera Gageac, le da un carácter muy poético.
Antonella del Valle Saavedra, la autora del guión, alcanza una síntesis de la novela en un relato que deja la sensación que no le falta ni le sobra nada.
La película está acompañada de frases del estilo: “mis padres tenían un apasionado divorcio infinito”.
Cuando se refiere a la obra y su carácter: “El único vínculo real de la autobiografía con la vida es el nombre.
La gran metáfora de la autobiografía es la lápida porque trae los hechos fundamentales de nuestra vida, el nombre, la fecha de nacimiento, el año de la muerte y a veces, una breve declaración de afecto.”
Todo esto conjugado, crea un clima y una atmósfera de un relato que embellece por diversas fuentes, desde la narrativa, la musicalización, la fotografía, los efectos fotográficos y la fortaleza de la historia en sí misma.
ADN, con muy buen tino, incorporó para esta 8va semana cortometrajes de escuela, como en este el caso. Y, “Esta herida cuando no cicatriza se vuelve piedra”, es una muestra que las escuelas de cine están produciendo un nivel de realizadores a los que se le deberá prestar mucha atención.
Puntaje:95.
Calificación:
Dirección
Fotografía
Guion
Montaje
Sonido
Un cortometraje de escuela que ya es una obra magistral.
